Cuando perdemos uno o varios dientes perdemos función y estética. Se altera la posición de los dientes vecinos, favoreciendo las enfermedades periodontales, la caries, los problemas de la articulación temporomandibular, etc. La pérdida de dientes puede acontecer a cualquier edad y los implantes permiten conseguir una solución óptima y funcional en casi todas las situaciones clínicas.
La colocación de implantes es actualmente un procedimiento sencillo, seguro y fiable en el cual mediante una pequeña cirugía se restituyen las piezas dentales perdidas. También se sustituyen por implantes las dentaduras postizas que con el tiempo originan una movilidad excesiva, molestan e incomodan.
Los implantes sirven para reponer los dientes perdidos y restituir las cualidades de la boca, sin “tocar” otros dientes. Su función es la de hacer de raíz para las prótesis que sujetan.
No hay límite de edad para la colocación de implantes dentales, siempre que el crecimiento óseo de la persona haya finalizado, pasada la adolescencia.
Las personas mayores son las que más se benefician de la colocación de implantes debido a que los resultados estéticos que producen en ellas son más significativos.Los implantes le permitirán comer lo que desee sin las limitaciones que tenía antes del tratamiento.
Los implantes actúan y funcionan como dientes naturales permitiéndole hablar, comer y sonreir con total libertad.
¿Qué es un implante dental?
Es un pequeño tornillo de titanio puro, material biocompatible con el cuerpo humano, que se coloca en el hueso maxilar superior o inferior con el fin de sustituir a las raíces de las piezas dentales perdidas, funcionando como dientes naturales.
Sobre el implante se colocará un pilar transgingival que soportará la nueva prótesis (el diente que se verá). El implante no tiene sentido sin un correcto tratamiento restaurador. Sobre los implantes podemos sujetar todo tipo de prótesis, desde prótesis completas hasta diente unitarios o puentes de más de una pieza. Su dentista restaurador, debe valorar cada caso y utilizar todos los medios diagnósticos (radiografías, TAC, modelos, etc), para obtener la máxima seguridad en el tratamiento, programando desde un principio, el tratamiento protésico que le orientará la fase quirúrgica.